Además de ser una hermosa y saludable actividad, el enseñarle al bebé a entrar en contacto con el agua es algo sumamente aconsejable para estimular el desarrollo del bebé, pues con ello éste logra ingresar en un medio completamente diferente al que está acostumbrado, algo importantísimo para incentivar su desarrollo.
Ahora que el verano está acercándose en Europa es un momento ideal para hacer que el bebé entre en contacto con el agua de alguna piscina. Pero ten cuidado, el hacerlo muy prematuramente es un peligro importante porque el bebé no está acostumbrado a este medio aún.
La etapa ideal para hacer que el bebé entre en contacto con el agua son los cuatro meses de edad, pues aquí el pequeño empieza a reaccionar con respuestas a las sensaciones, lo cual lo prepara para entrar en contacto con este medio tan diferente.
La experiencia es hermosa y muy significativa, y si te has decidido a llevarla a cabo un buen consejo es el de filmarla y sacar fotos, pues se trata de un momento que por definición merece ser grabado en la memoria.