Desde hace varios años la Organización Mundial de la Salud (OMS) y UNICEF lanzaron una declaración conjunta con las que se recomienda a los líderes de la Maternidad la aplicación en todo el mundo de los “Diez pasos para una lactancia exitosa”.
Estas declaraciones incluyen, entre otras cosas, la educación prenatal de las mujeres sobre los beneficios de la lactancia materna y la educación en la gestión práctica de la lactancia materna.
La leche materna es sin duda el mejor para la alimentación infantil, es específico de la especie y reduce significativamente el riesgo de infecciones gastrointestinales y respiratorias agudas y crónicas, infecciones del tracto urinario, las alergias, la diabetes mellitus insulino-dependiente enfermedad inflamatoria del intestino.
A través de un reflejo neuroendocrino, que se activa por la succión del pezón, se libera en la circulación materna, la oxitocina, una hormona que causa una reducción fisiológica de la hemorragia posparto.
A través de la lactancia materna, la madre regresa a su nuevo peso ideal más rápido y obtiene una mineralización más rápida y completa, con un menor riesgo de osteoporosis en la post-menopausia. En los “Diez pasos para una lactancia exitosa” se consideran esenciales para promover la iniciación y consolidación, el contacto precoz después del nacimiento, el alojamiento conjunto y la lactancia a demanda.